¿Crees que el valor de las cosas equivale al porcentaje de dinero que estas traigan?

POR UNA CULTURA LIBRE

Lessing.2004

Por una cultura libre. Cómo los grandes grupos de comunicación utilizan la tecnología y la ley para clausurar la cultura y controlar la creatividad



Para Lessing existen primero 2 premisas de las cuales se debe partir: la cultura comercial y la no comercial, siendo la primera una forma de comunicación libre y la segunda cuando la información es vendida o comercializada.

Con respecto a lo segundo aparece un problema: la distribución de esta información teniendo en cuenta su dueño, es decir, la información de propiedad. Esta propiedad se ve afectada bajo ciertas leyes de protección como el copyright , sin embargo existen otros problemas más allá de proteger la propiedad y es la competencia y la inestabilidad económica que esto puede traer.

Lessing dice que la clausura o el control económico pasa por encima del valor cultural de la propiedad, es decir, lo que afecte a la empresa económicamente por la distribución de la propiedad será primordial para apoyarse en una ley de protección, abandonando lo que en realidad esta propiedad puede significar y el valor que constituía al producto en un fin inicial, viéndose afectados acá la intención del autor y la creatividad del mismo.

Esta premisa da lugar a una nueva discusión: la piratería, de la cual este autor muestra una de las leyes en su contra: “El trabajo creativo, cada vez que use, o tome, el trabajo creativo de otros, estoy tomando de ellos algo con valor. Cada vez que tomo algo de alguien con valor, debería tener su permiso. Tomar algo de alguien con valor sin su permiso está mal. Es una forma de piratería”, a esto Lessing propone que si algo tiene “valor” entonces debería existir un “derecho” de poseerlo, siendo esto lo que promueve a la libertad y la creatividad.

Entonces esta creatividad queda opacada por el accionar de las leyes, ya que el valor creativo queda sumergido a la labor comercial. Por lo tanto el valor debería ser lo primordial y la acción gubernamental no debería tapar la creatividad con leyes que permitan que lo económico aplaste el sentido por el cual se hacen las cosas: el valor.

En un mundo global el acceso a la información se convierte en una necesidad, ya estamos acostumbrados a distribuir cualquier tipo de información todo el tiempo. Estoy de acuerdo con Lessing en que la creatividad y la necesidad de conocerla es un derecho.

Uno de los temas que más tocan el hecho de piratería es la música. Este icono del valor creativo se distribuye con facilidad por toda la red, casi que se puede conocer música sin editar o trabajos discográficos de bandas que aun no han sido lanzados al mercado.

Esto ocurre en espacios como www.lasfm.com por ejemplo, que son redes de emisoras que dan a conocer contenidos que aun son invisibles para el comercio, incluso las emisoras ofrecen la posibilidad de descargar contenidos inéditos como radionica http://www.radionica.gov.co/ , cuando visitamos este tipo de medios o estamos interesados en conseguir lo último de “the strokes”, no estamos pensando en una idea vendida de información, estamos consultando porque nos gusta la banda y queremos escuchar sus primicias, por lo tanto es derecho porque es importante creer y estar interesados en el valor que esta banda o su música pueda tener para nosotros.

Otro aspecto es que se tenga la intención de la “piratería”, me refiero aquí a que el internet ha creado un espacio de muestra de creatividad bastante amplio en sentido musical. Aquí la idea no es entonces vender sino mostrarle al mundo entero la música que cualquiera puede hacer, en espacios como www.myspace.com, o www.facebook.com, por ejemplo, la idea es precisamente mostrar y distribuir la música por todas partes sin importar la venta de la misma, es decir enseñarle al mundo el valor y abandonar por completo el comercio, siendo esto precisamente piratería.

Programas como Soulseek, http://www.slsknet.org/, distribuyen música entre computadores de todo el mundo que se transfieren música de unos a otros como si fuera un rumor.
Me parece algo positivo el hecho de que exista un espacio en que las personas pueden interactuar con las formas de expresión de otros. Por otro lado ¿acaso el valor de la creatividad se pierde con la piratería? Creo que no. Nunca va a ser nada más preciado que un CD original, así ya lo haya escuchado dos años antes todos los días en un CD pirata. Entonces el valor sigue siendo el mismo que cuando lo obtuve por medios “ilegales” y de todas formas estoy consumiendo.

Entonces me parece que el derecho de conocer, tener y distribuir la propiedad está estrechamente ligado con el valor, ¿por qué habrían de prohibirme el derecho a tener lo que me gusta y dárselo a conocer a otros, si las multinacionales no van a quebrar por ello?
Y de todas formas las bandas lo hacen, distribuyen su música en espacios web, en emisoras y demás, para que todos conozcan lo que viene y ya lo hayan disfrutado tanto que el día que logren conseguir el original sea para quererlo tanto que lo cuidaran con su alma.

resta entonces decir que la creatividad no es para controlarla y si hay un cambio inevitable entonces porque esconderlo o cohibirnos de él, mas bien hacerlo ver como algo positivo y no descartar pero igualar la idea del comercio a condiciones en que la creatividad sea libre.